La importancia de la dieta para los pacientes con Cáncer
El binomio alimentación-cáncer se trata desde dos vertientes diferentes. Por un lado, considerando la dieta como factor precursor o de prevención del cáncer y, por otro, desde el papel de la dieta en el tratamiento del paciente oncológico.
Hasta fechas recientes no resultaba nada fácil establecer una relación clara y directa entre alimentación y cáncer. Los diferentes estudios no demostraban individualmente de forma clara, ni el grado de relación, ni el momento del desarrollo tumoral en el que intervienen algunos alimentos o determinados hábitos alimentarios. Sin embargo, son tantos los estudios llevados a cabo y tan amplia la información en ellos recogida, que al estudiar el problema desde una perspectiva global e integradora los resultados son más que convincentes.
Dietas ricas en carnes y grasas, algunas vitaminas y micronutrientes han obtenido, después de muchos estudios, calificaciones de promotores o protectores del cáncer, respectivamente.
El otro aspecto, el tratamiento nutricional de los enfermos oncológicos, que relaciona la alimentación y el cáncer, ha dado en los últimos años frutos muy positivos, permitiendo una mayor calidad de vida a los enfermos sometidos a terapias curativas o paliativas.
En los últimos cinco años están proliferando los estudios sobre el metabolismo de las células tumorales. Algunos tumores como el cáncer de próstata se alimenta principalmente de grasas, otros principalmente de glucosa y otros, como el cáncer de pancreas combinan un alto consumo de glucosa y proteinas.
Conociendo en detalle que rutas metabólicas son las más utilizadas por cada tipo de tumor, podemos diseñar dietas personalizadas dirigidas a frenar el crecimiento tumoral.
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Resveratrol y cáncer
Numerosos estudios sobre resveratrol han demostrado un gran potencial en el tratamiento de distintos tipos de cáncer, debido a su capacidad de afectar varias rutas moleculares. Resveratrol ha mostrado también capacidad para eliminar las células madres tumorales, que son las principales inductoras del crecimiento de los tumores.
Dieta cetogénica y cáncer. Alimentos permitidos
La célula tumoral necesita metabolizar grandes cantidades de glucosa para obtener la energía necesaria para su crecimiento. Por ello, la célula tumoral tiene en su membrana muchos receptores para que la glucosa circulante se una a ellos. La dieta cetogénica consiste en disminuir drásticamente los carbohidratos de la dieta, ya que estos son la fuente de glucosa.
Cúrcuma y cáncer de mama
La curcumina ha demostrado su capacidad de eliminar las células madre tumorales, además de aumentar la eficacia de la quimioterapia en el tratamiento del cáncer de mama. La curcumina también tiene el efecto de aumentar la sensibilidad de las células del cáncer de mama a la quimioterapia.
Quercetina y Cáncer
Diversos estudios han demostrado que la quercetina bloquea tanto la glucólisis como las funciones mitocondriales de las células tumorales, cortando la producción de energía de la célula tumoral. En combinación con quimioterapia y radioterapia, la quercetina actúa en sinergia para aumentar la sensibilidad del tratamiento
Licopeno y Cáncer
Los efectos anticancerígenos del licopeno implican la modulación de vías que retrasan el crecimiento de tumores e inhiben la progresión del tumor. Este artículo tiene como objetivo evaluar los beneficios de la suplementación con licopeno en la prevención y el tratamiento del cáncer basándose en los resultados de estudios científicos.
Marcadores Tumorales para Cáncer
En el tratamiento del cáncer, el seguimiento preciso es fundamentales para mejorar los resultados del tratamiento y la supervivencia del paciente. En este sentido, los marcadores tumorales son una herramienta valiosa en el diagnóstico y seguimiento del cáncer. Nos permite cuantificar la actividad tumoral y la respuesta al tratamiento mucho antes de realizar las pruebas de imagen de control (TAC, PET TAC, resonancia).